Toletum paleocristiana, visigoda e islámica. Aportaciones de la arqueología alemana

La ciudad de Toledo se convirtió en un foco de atracción
para los historiadores alemanes del siglo XIX, tanto
por su rico pasado como por la existencia de un ambiente
germanófilo que favoreció su presencia. Desde
entonces han sido muchas las aportaciones realizadas
por profesionales de ese origen en el entorno de la ciudad,
incrementadas a partir de la creación del IAA en
Madrid en 1954. A él se debe la llegada de H. Schlunk
que fue el primero en plantear un proyecto de investigación
sobre la capital del reino visigodo toledano. Su
labor abrió una línea de investigación que tuvo continuidad
en la figura de Theodor Hauschild, plasmada en
el proyecto de investigación sobre el mausoleo tardorromano
de La Pueblanueva.
Intereses diferentes son los que explican la llegada de
Christian Ewert a Toledo y el inicio de sus estudios sobre
importantes monumentos de época andalusí. Otra línea
novedosa es la inaugurada por Thomas G. Schattner, que
ha permitido conocer destacados aspectos de la ciudad
romana y el establecimiento de una colaboración estable,
centrada en la organización y publicación de varios coloquios,
en los que la arqueología toledana ha tenido especial
protagonismo.